ELON Y DONALD, LOS COMPINCHES por Rosa Miriam Elizalde

CULTURA Y RESISTENCIA

Se verán horrores. No es casualidad que Elon Musk armara su espectáculo de la compra de Twitter antes de las elecciones intermedias en Estados Unidos. Es difícil de tragar que el sudafricano se comporta como Atila sólo por simpatías hacia el probable candidato republicano a las elecciones de 2024. La trama de fondo aquí no es la afición a Trump; él es el Trump de Silicon Valley.

No es nueva la idea de que estos dos provienen del mismo tronco ideológico. Hace cuatro años, después de un exabrupto de Musk –llamó pedófilo al buzo que salvó a 13 niños tailandeses atrapados en una cueva–, el periodista Bret Stephens, de The New York Times, pidió a los lectores que identificaran al personaje:

“Tiende a erupciones desquiciadas en Twitter. No soporta las críticas. Abomina los medios por sus supuestas mentiras y amenaza con crear un aparato estalinista para controlarlos. Consigue que…

Ver la entrada original 687 palabras más

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s