
El jefe del Consejo Distrital de Salud Indígena del pueblo yanomani, Junior Hekurari, elaboró un reporte que da cuenta de los efectos dramáticos que sufren los 35 mil originarios que pueblan Roraima debido al abandono, la minería, la malaria y las carencias alimentarias.
La catástrofica situación de las comunidades yanomani fue intensificada premeditadamente por el régimen Bolsonaro.
De acuerdo al periódico Sumaúma, 570 menores yanomani fallecieron entre 2019 y 2022, de los cuales 152 padecían desnutrición. Hekurari informó que los niños muertos pueden ser muchos más debido a que no existen registros de las autoridades sanitarias y se trata de una zona donde la malaria provocó estragos fatales.
Tras la visita de Lula a las comunidades indígenas el 21 de enero pasado, el espacio aéreo de la Tierra Indígena Yanomani fue bloqueado para detener el tráfico minero en el área, además de restablecerse los servicos sanitarios para los casos de urgencia.
Sin embargo, Hekurari notificó que aún faltan 200 profesionales de la salud para asistir y salvar a las comunidades afectadas por la devastación de la minería.
Junior Hekurari denunció que Jair Bolsobnaro planificó desde 1992 el aniquilamiento del pueblo yanomani, impidiendo la demarcación de la Tierras Indígenas para beneficio de la minería ilegal.