
La imagen de Irací Hassler, candidata a Alcaldesa de Santiago, haciendo una parodia pública de la tortura llamada “submarino” acompañada de risas y órdenes a quien era sumido en el agua, fue una práctica común durante los inrrogatorios en los centros de detención de la dictadura en busca de confesiones.
No es posible encontrar algún sentido de racionalidad o excusas a ese escenario violento y agraviante que logró, más que ganar votos, malestar, repudio y retraumatización. Aceptar el sketch de Hassler como normal, sería aceptar que la desmemoria e irrespeto por las víctimas ganó por sobre la lucha, de tantos años, por construir y preservar la memoria histórica.
Nosotras y nosotros nos negamos a aceptarlo y una vez más levantamos en alto la dignidad de quienes dieron sus vidas para que hoy tengamos elecciones sin parodias repudiables.
Las excusas de Iraci han sido una justificación al sin sentido.
Si, señora, sabemos que no era real, lo que usted no comprende es que el país vivió una dictadura que dejó huellas indelebles y que su actuación no se puede aceptar.
Adherimos:
Mireya García R.
Defensora de DDHH
Marta Cisterna F.
Defensora de DDHH
Juana Aguilera J.
Defensora de DDHH
Denni Traubmann S.
Hijo de D. Desaparecido
Juana Ester González
Esposa E. Político
Isabel Gallardo M.
Familiar E. Político
Verónica Heredia B.
Hija D. Desaparecido
Angélica Palleras N.
Hija E. Político
Leila Nash S.
Hermana E. Político
Adriana Goñi Godoy
Defensora DDHH
Evelyn Silva P.
Familiar D. Desaparecido
Loreto Heredia B.
Hija D. Desaparecido
Ninon Neira
Defensora DDHH
Jacqueline Castro R. Defensora DDHH
Vilma Montoya R.
Hija D. Desaparecido









