IMF: International Mother Fuckers (por sus siglas en inglés)
Por Luis Casado

Cuando abordas un oficio, una ciencia o una disciplina desconocida para ti, lo primero es aprender el vocabulario adecuado de otro modo no entenderás nada.
Si construyes una techumbre más te vale saber lo que son la limatesa y la limahoya a la hora de pensar el sistema de drenaje de las aguas lluvias. Cada oficio tiene sus glosarios específicos. De niño supe lo que era un pespunte. La RAE dice: Labor de costura, con puntadas unidas, que se hacen volviendo la aguja hacia atrás después de cada punto, para meter la hebra en el mismo sitio por donde pasó antes. Por no aburrirte no agrego el medio pespunte, el bies, el fruncido, embeber y otros términos tan apañados como esos.
Con lo que me hice la picha un lío fue con la Economía. El término valor, por ejemplo ¿qué significa? No me refiero al sinónimo de coraje, sino al Grado de utilidad o aptitud de las cosas para satisfacer las necesidades o proporcionar bienestar o deleite, o bien a esa Cualidad de las cosas, en virtud de la cual se da por poseerlas cierta suma de dinero o equivalente.
Valor es palabra polisémica, y ahí ya tienes dos definiciones que carecen de precisión y están muy lejos de ser exhaustivas. Una toca el valor de uso, y la otra el valor de cambio. El grado de utilidad depende del homo sapiens del que se trata y de la situación en que se encuentra. Para un hipertenso un comprimido de nebivolol –medicamento genérico de la familia de los betabloqueantes– es de gran ayuda. Para un hipotenso puede ser un veneno peligroso.
Lo mismo ocurre con cualquier otro producto, cosa o bien de consumo. ¿Qué dice la Economía al respecto? Misterio. El misterio es un serio percance muy frecuente en Economía.
En cuanto a esa cualidad de las cosas en virtud de la cual se paga para poseerlas, persiste el misterio. ¿Cuanto pagarías tú por media tonelada de escandio (Sc), itrio (Y), lantano (La), cerio (Ce), praseodimio (Pr), neodimio (Nd), prometio (Pm), samario (Sm), europio (Eu), gadolinio (Gd), terbio (Tb), disprosio (Dy), holmio (Ho), erbio (Er), tulio (Tm), iterbio (Yb) o lutecio (Lu)?
Se trata de las tan manoseadas tierras raras, por las cuales suspiran importantes empresas tecnológicas occidentales, de la industria militar.
Ya tuve la ocasión de preguntar… ¿qué, o quién, y en virtud de qué autoridad le asigna a tal o cual cosa, bien o producto, un determinado valor de cambio? Lo que por lo demás no satisface toda la ecuación: queda por saber… ¿a cambio de qué?
Ahí entramos en el mambo de la moneda… lo que comenté en una parida reciente.
Esta vez lo que me incomodó –para no decir que me tocó los cojones– es una boludez proveniente de una fuente abundante en la materia: el FMI, o IMF si escoges su denominación en inglés.
Kristalina Georgieva, Directora General del Fondo Monetario Internacional, llamó a los europeos a despertarse para recuperar su retraso en materia de competitividad con relación a los EEUU y a China.
Kristalina, una burócrata búlgara, es economista y –peor aún– funcionaria internacional, lo que quiere decir que nunca le trabajó un día a nadie. Después de ejercer sus talentos como vice-presidente del Banco Mundial, desde el 1º de octubre de 2019 calienta el sillón que en su día ocupó (no es una referencia…) Christine Lagarde, y aún antes un cretino de mucho cuidado, Michel Camdessus.
Alguna vez –inspirándose de Adam Smith que visiblemente no había leído– Camdessus declaró “Es preciso que del egoísmo de los Estados salga el interés del mundo”. No contento de tal enormidad, agregó: “Los Estados deben ser monstruos fríos inteligentes”.
Camdessus era un liberal como Kristalina, tara imprescindible para dirigir el FMI, adosada al “individualismo metodológico, axioma según el cual una sociedad se resume a una polvareda de individuos” (B. Maris – Carta abierta a los gurús de la economía que creen que somos imbéciles. 1999).
¿A qué se refiere Kristalina cuando exige competitividad?
La Real Academia Española define competitividad como “la capacidad de competir o la rivalidad para la consecución de un fin”.
Esto que viene es oficial, admitiendo que uno pueda tragarse estas boludeces: “El Grupo del Banco Mundial trabaja junto a los países en vías de desarrollo para reducir la pobreza y aumentar la prosperidad compartida. ¿En serio? ¿Y el FMI?
“Según sus Estatutos, el FMI tiene por objeto promover la expansión armoniosa del comercio mundial y la estabilidad de cambio de las divisas, de desalentar el recurso a las devaluaciones competitivas y facilitar la solución ordenada de los problemas de balance des pagos.”
Ambas instituciones surgieron del estupro colectivo, sobre seguro y en despoblado, cometido por EEUU al término de la II Guerra Mundial, úsease los Acuerdos de Bretton Woods. Aprovechando que Europa estaba destruida, los campeones del mundo libre aprovecharon para garcharse a la Humanidad. Tal vez por eso muchos estiman que el BM y el FMI no son sino herramientas de chantaje, sumisión y control al servicio del imperio. La gente es mala…
Que el país más endeudado ante el FMI sea Argentina –su deuda es superior al total de la deuda de los siete países que siguen: Ukrania, Egipto, Pakistán, Ecuador, Costa de Marfil, Kenya y Bangladesh– es pura coincidencia.
Pregunta: ¿Cuál es la competitividad de Argentina?
Si la competitividad mide la capacidad para endeudarse y vivir el producto ajeno… el país más competitivo es Japón, cuya deuda soberana llegó al 260% de su PIB.
EEUU no lo hace mal, la suya alcanzó el 130% del PIB yanqui. Italia: 155% de su PIB. Francia y Gran Bretaña un 115% de sus PIB respectivos.
En cuanto a “la expansión armoniosa del comercio mundial” Kristalina –la liberal– no ha dicho esta boca es mía ante los aranceles de Trump, ni frente a la proscripción decidida por Donald de la globalización, del libre mercado y de la venta callejera de sopaipillas caseras.
Si examinamos las funciones del FMI, “la estabilidad de cambio de las divisas, desalentar el recurso a las devaluaciones competitivas y facilitar la solución ordenada de los problemas de balance des pagos”, Kristalina –que debieron llamar Opacina– ¿tiene algo que decir frente al titular de hoy de Les Échos, importante publicación financiera francesa?
Deuda: Europa bate todos los récords
Los países de la zona euro emitirán 1,5 billones de euros de deuda pública en el 2026
Con 310 mil millones de euros, Francia será una vez más el Estado que más deuda contrae
Largo tiempo “frugal”, Alemania se endeudará para invertir en defensa e infraestructuras
No. Nada que decir.
Kristalina, en su discurso en el Instituto Milken en Washington unos días antes de las Asambleas Generales de la BM y del FMI (octubre 2025), le increpó su inacción a la Unión Europea:
“Uds. saben lo que deben hacer. Nombren un ‘tsar del mercado único’ dotado de real autoridad para hacer avanzar las reformas”.
¿Cuales reformas? Kristalina no tiene competencias en materia constitucional europea, y aunque parezca curioso el “gobierno de la Unión” tampoco. Nombrado a dedo, con “comisarios” (pseudo ministros) designados mediante el jueguito de la biroca, ese “gobierno” es el producto de una estafa institucional lograda mediante votaciones truchas del Congreso francés, con senadores cuyo mandato había caducado. Democracia que le llaman…
No se atrevieron a llamar a referendo por la sencilla razón de que el pueblo francés votó contra el Tratado Constitucional Europeo el 29 de mayo de 2005, con una fuerte mayoría de NO de un 55%. El 2 de junio siguiente, los holandeses también lo rechazaron. Todo lo que siguió fue una vasta y burda estafa organizada por Nicolas Sarkozy… que hoy duerme en prisión por otros delitos.
¡Pero Kristalina quiere competitividad!
Para ello la UE debe reducir sus costes laborales, reducir sus presupuestos públicos, privatizar todas sus empresas públicas, eliminar la protección de sus trabajadores asalariados, reducir los impuestos aplicables a la actividad productiva, a las multinacionales y a la especulación bursátil.
Y todo ello en la más completa “transparencia”, otra noción con la que engañan a los incautos.
Transparente, para la RAE, es la cualidad de transparencia, diafanidad, nitidez, luminosidad, claridad, limpidez, translucidez.
Para que te quede claro, algo transparente no se ve. Translúcido: Que deja pasar la luz, pero que no deja ver nítidamente los objetos (RAE).
Para Kristalina, o más bien para Opacina, lo importante es suprimir las fricciones fronterizas en el mercado del trabajo (no sabe que Trump expulsa a los trabajadores inmigrados…), en el comercio de bienes y servicios, (no sabe que Trump impone aranceles como le da la real gana), de la energía y de las finanzas (no se entera de las sanciones al petróleo y al gas rusos, ni de los chantajes y el bloqueo a Venezuela, etc.).
“Alcanzad el dinamismo del sector privado yanqui”, ordena, dando un ejemplo emblemático: “Ved cómo siete mega empresas yanquis –ninguna de las cuales existía hace 51 años– muestran una capitalización bursátil que eclipsa la de las empresas europeas de la misma edad”.
Kristalina, economista de su estado, no tiene la más pijotera idea de lo que ocurrió en el año 1929…
Considerada como la primera crisis sistémica de la historia, comenzó por una crisis financiera en EEUU, esa que trajo la Gran Depresión que se propagó en el mundo entero.
En el ámbito financiero, el índice de las cotaciones bursátiles de Wall Street había aumentado más que el volumen del lucro: en 10 años las cotaciones se multiplicaron por 3 con una subida media del 12% anual. El célebre economista yanqui Irving Fisher pudo declarar en octubre 1929 “el curso de las acciones alcanzó una alta meseta permanente”. Irving Fisher: la presciencia en barras…
EEUU asistía a una euforia especulativa a la que arrastraron a una parte importante de la población: exactamente como ahora…
El milmillonario francés Bernard Arnault, dueño del conglomerado LVMH (los productos de lujo franceses) le propone a tododiós “ganar mil euros al día, hasta 30 mil euros al mes”, invirtiendo en un invento suyo en el que fue asesorado por “expertos”.
Bernard Arnault, poseedor de una fortuna estimada en U$ 197 mil millones, es el único genio que comprende a Kristalina… Tal vez desea emular a Elon Musk, otro visionario.
¿Sabes cómo se dice boludo en el glosario de los economistas?









