
El Comando Central del Ejército de Liberación Nacional de Colombia, ELN, planteó que las clases dominantes y privilegiadas del país están impidiendo incluso la realización de las reformas más sencillas del Gobierno de Petro.
Asimismo, la agrupación revolucionaria se refirió a que las causas profundas del Estallido Social del 2021 se encuentran directamente asociadas a los efectos de la crisis del capitalismo neoliberal, entre los que se cuentan un 80 por ciento de la población colombiana hundida en la pobreza; un 60 por ciento de los trabajadores sometido a la informalidad y la inseguridad laboral, carentes de todo derecho elemental, sin garantía de pensionarse con dignidad y víctimas de un sistema de salud pública transformada en una mercancía más. Y agregaron que el país sigue dependiendo de los capitalismos centrales: Colombia, en la división internacional del trabajo, persiste en su condición primario extractivista y exportadora de los bienes comunes del pueblo para beneficio de transnacionales, cuyos intereses se encuentran resguardados por la industria militar y paramilitar del Estado.
El ELN apuntó que el actual Gobierno poco ha podido hacer en medio de unas relaciones de fuerza donde las clases propietarias obstaculizan cualquier reforma que roza sus prebendas. A lo anterior, se agrega la corrupción estructural distribuida en todos los poderes del Estado, lo que en conjunto va generando las condiciones para un nuevo estallido social.
La organización insurgente señaló que los cambios necesarios para alcanzar la paz con justicia social, sólo tienen su posibilidad en el despliegue de las fuerzas populares y sus comunidades en lucha. Las elites jamás han regalado derechos a los oprimidos: ellos siempre se tienen que conquistar, al igual que es preciso batallar para llegar a ser libres, soberanos y superar el castigo imperialista y colonialista, dijo el ELN.