Este miércoles 20 de abril, una corte inglesa resolvió enviar a la ministra del Interior, Priti Patel, el mandato para extraditar a Estados Unidos al creador de WikiLeaks, Julian Assange.

La jefa de Interior británica cuenta con 60 días aplazables para firmar o no la resolución judicial. Paralelamente, la defensa de Assange informó que apelará al fallo del tribunal dentro del plazo máximo de cuatro semanas.

De acuerdo a la normativa de Gran Bretaña, la ministra del Interior únicamente puede rechazar una resolución de explusión del país en situaciones especiales que estén contemplados en la Ley de Extradición, y a la vez, cuando el caso coincide con los pactos internacionales que existen con el país demandante, o sea, con Estados Unidos.

El magistrado que tomó la decisión contra Julian Assange, explicó que la apelación del prisionero se realiza frente al Tribunal Superior inmediatamente después de conocerse la decisión que adopte la jefa de Interior.

A inicios de 2021, un tribunal británico falló que Assange no debiera ser extraditado al país norteamericano porque el perseguido sufre de autismo, depresión y corre el riesgo de quitarse la vida en una cárcel de Estados Unidos.

Pero la resolución de la corte inglesa fue apelada exitosamente por el departamento de Justicia estadounidense. Luego, el Tribunal de Apelaciones de Gran Bretaña determinó la extradición de Julian Assange, la que posteriormente fue rechazada por la Corte Suprema.

El régimen estadounidense pretende enjuiciar a Julian Assange por crímenes de espionaje por difundir profusamente las atroces violaciones de los derechos humanos cometidas por diversas administraciones de la Casa Blanca en Guantánamo, Irak y Afganistán.