
El Ministerio Público de la región de La Araucanía, empleando similares argumentos que la dictadura militar, solicitó 25 años de prisión para el vocero de la Coordinadora Arauco Malleco, CAM, Héctor Llaitul, fundamentando con la Ley de Seguridad Interior del Estado, o sea, con la legislación fundada en la doctrina del enemigo interno, tal cual la época de Pinochet.
La Fiscalía regional, extensión de los intereses extractivistas y de los colonos terratenientes en territorios ancestrales mapuche, levantó los cargos de una supuesta apología de la violencia, robo de madera y violaciones a la propiedad privada contra Llaitul, uno de los liderazgos más resueltos del pueblo mapuche que actualmente lucha por la autonomía y la recuperación de sus tierras.
Héctor Llaitul ya fue detenido y se encuentra en el Centro Penitenciario Preventivo, en el cual, desde el pasado 29 de noviembre, está realizando una huelga de hambre junto a otros dirigentes mapuche por las irregularidades del proceso que les sigue el Estado chileno.
Por su parte, la defensa de Llaitul, en manos del abogado Rodrigo Román, indicó que no hay ninguna prueba concreta contra su protegido, y que, al igual que en otras ocasiones, se trata de persecución política de ideas, esto es, las imputaciones se basan solamente en los dichos que ha emitido Llaitul.
La CAM es una de las diversas organizaciones de resistencia mapuche que existen frente a la militarización brutal del área correspondiente a territorio indígena, hoy explotado por industrias extractivistas de la madera y la energía. Debido a la visibilidad que ha obtenido Héctor Llaitul en virtud de montajes jurídico-políticos urdidos en su contra, y de los que ha salido en libertad y sin penalizaciones, ahora es el turno del gobierno de Boric intentar aniquilar a Héctor Llaitul, hijo de la resistencia de un pueblo originario que lleva 500 años luchando por sus derechos.