Crimen organizado, violencia, Corrupción y Burocracia se propagan como incendios forestales.
Como lo dice el tango Cambalache: «El mundo fue y será una porquería, ya lo se…». Estamos hasta el cuello con uno de los lastres más pesados que una sociedad pueda soportar; un modo productivo cuya premisa es transformar todo en mercancía y como consecuencia de ello, un aumento de las desigualdades sociales, el crimen…